viernes, 3 de octubre de 2014

Pérdida de memoria


Como consecuencia de la gran cantidad de escándalos de corrupción que lamentablemente están siendo noticia a diario es frecuente escuchar sandeces como : "Con Franco esto no pasaba", "Al final se reconocerá que con Franco estábamos mejor", "Aquí lo que hace falta es que vuelva Franco".....

Algunos desmemoriados también hicieron esos comentarios cuando el sr, Ibarretxe presentaba su plan o, más actualmente, cuando el sr. Mas moviliza a los catalanes.

¿Acaso en época de Franco no había corrupción?. ¿O más bien no se publicaba?
¿Alguien duda de la cantidad de nepotismo en aquella época?. Si eras familia, amigo o del régimen, las puertas estaban abiertas para cualquier cosa, para cualquier puesto, incluso para cualquier tramitación administrativa, que se hacía entrando por la puerta de atrás. Pero si tenías que hacer cola ante una ventanilla.....el vuelva usted mañana, o aquí le falta una póliza eran las respuestas habituales.
El empleo público estaba reservado a adscritos y allegados al régimen y en el privado tenías que aceptar salario y condiciones. Si había escasez de seguridad, te aguantabas y te la jugabas porque si la reivindicabas te enviaban a la guardia civil (caso Hunosa, entre otros muchos), por comunista.

Más aún, estaban reglamentadas (y quizá legisladas) corruptelas como las siguientes:
Todo médico militar tenía derecho a que el Instituto Nacional de Previsión (la Seguridad Social) le proporcionase un puesto de trabajo en la sanidad pública civil en su lugar de destino. Es decir, cuando te incorporabas a una nueva ciudad, automáticamente te asignaban cartillas de trabajadores de la Seguridad Social para que sumases una segunda nómina a la de militar.

A todo oficial que llegaba a general se le asignaba algún puesto de consejero de una gran compañía

No olvidemos la impunidad y el apoyo con el que el yerno podía aprender/experimentar/trabajar en temas de cardiología

Tampoco hay que olvidar el sufrimiento que llevó a muchos españoles la llamada Ley sobre Peligrosidad Social, o la misma existencia de la pena de muerte, o los asesinatos políticos, o las leyes de fuga aplicadas....claro que no había estadísticas de paro como ahora, entre otras cosas porque no había apoyo a los parados.

El cimiento del régimen era la Iglesia, porque a los "ojos de Dios nada se escapa" y, si no te pillo en este mundo, te espera el castigo eterno. El sexo era tabú y ante cualquier caricia pública la mujer era considerada como prostituta. No olvidemos las "enseñanzas doctrinales" y normas de comportamiento impuestas por Pilar Primo de Rivera. Por supuesto, el único matrimonio era el eclesiástico, que requería la partida de bautismo. Todos católicos por decreto. Y la censura planeaba con respecto a la lectura, cine, teatro, música o cualquier manifestación cultural.

Eso de que cualquier tiempo pasado fue mejor, no es aplicable en este caso, por mucho que pretendan convencernos.....seguramente los que para ellos si lo fueron.

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